Isaac, Nora, Laila, Johanna y Estefanía son un grupo de estudiantes de la Universidad de Sevilla, en concreto de la Facultad de Filología Hispánica. Ellos han creado el blog ¿qué hacemos contigo? sobre un proyecto interesantísimo que han realizado. El objetivo del mismo es que tanto estudiantes como docentes, a través del juego, entiendan y tomen mayor conciencia de aquellas dificultades a las que se enfrenta un niño con dislexia en su día a día.
Dislexia Sevilla tuvo la suerte de colaborar con ellos, y estar presentes como invitados durante la presentación del mismo. Para dicha presentación realizaron varios juegos creados por ellos mismos.
Éstos son el resultado de su investigación llevada a cabo sobre cada tipo de trastorno del lenguaje y sus consecuencias para la persona que lo padece. Según nos contaron en su presentación «Están hechos con la intención de hacernos sentir como se siente un niño con esta forma de funcionar».
Y para ello, crearon un lema que nos encantó, como ellos lo llamaron «su principal motor»
SI QUIERES SER BUEN DOCENTE,EMPATIZA CON LA GENTE
Un niño disléxico no hace una correcta conexión grafema- fonema, esto hace que su lectura de palabras poco frecuentes o largas sean muy difíciles de leer correctamente para ellos. Tienden a mezclar fonemas, los cambian sobre todo en sílabas en las que hay grupos consonánticos, aunque en cualquier momento confunden unos por otros. Por esta y otras razones, la lectura se vuelve para ellos una auténtica odisea, en la que, no solo no entienden lo que están leyendo, sino en la que el tiempo se les hecha encima. Salir a leer en alto en una clase, delante de compañeros que tampoco entienden lo que está leyendo, es, como mínimo, una estresante y humillante situación, en la que el estrés y el sentimiento de «trágame tierra» se apoderan de todo.
Este juego pretende hacernos sentir, a nosotros, como uno de estos niños puede sentirse en esta situación. Un juego de similación, en el que, aunque jugando, podemos ponernos en los zapatos de una de las muchísimas personas que tienen que luchar con estos sentimientos cada día al entrar en clase.
En el juego, hay un mazo de cartas azules (llamadas cartas dislexia por estar escritas tal y como un disléxico podría leer un texto) y un mazo de cartas rojas (son las mismas cartas que las azules, pero están escritas correctamente).
La finalidad del juego, es conseguir leer todas las cartas dislexia y encontrar sus cartas gemelas antes de que el otro equipo lo consiga. La presión será muchísima por el tiempo (ya que hay que hacerlo antes que el otro equipo) y también el sentimiento de estrés y confusión al leer cosas sin sentido. Después de jugar, entenderás mucho mejor por lo que pasa un niño disléxico cuando sale a leer en alto en medio de una clase.
Objetivo del juego: que los docentes se pregunten «¿Qué puedo hacer para ayudar a este niño?»
JUEGO 2: DISLALIA Y AFASIA
Para este juego contamos con nueve cartas, cada una de ellas indicando una acción a realizar y dos dados.
Se tiran los dados, si toca un número del uno al nueve, se realiza la acción de la carta correspondiente.
Los niños con afasia y dislalia tienen que volver a aprender a hablar, escribir y leer. Las cosas más básicas para el uso de la lengua oral o escrita.
A través de este juego vamos a tener muy difícil llevar a cabo cosas que en nuestro día a día son tan sencillas que ni las pensamos.
Es un tremendo reto que superar cuando has perdido capacidades articulatorias y cognitivas a causa de enfermedades, golpes, operaciones, infartos o cualquier tipo de consecuencia de un perjuicio a nivel traumático en el cerebro.
JUEGO 3: DISGRAFÍA
En él hay 6 estancias o tareas diferentes que hay que completar para que aquellos estudiantes que van a ser profesores sean capaz de empatizar con los niños que sufren disgrafía. Aun cuando se está jugando, el jugador experimentará la frustración que se siente al no poder formar palabras y frases correctamente. Ya sea que se trate de temblores en el pulso, de la necesidad muy fuerte de concentración durante mucho tiempo para llevar a cabo bien la tarea o la imposibilidad de concentrarse (como sería el caso de un niño hiperactivo), con este juego vas a poder ponerte en los zapatos de estos niños.
Las seis estancias pone en relieve algunas de las situaciones a las que se enfrentan estos niños a diario, como es la dificultad al escribir, copiar de la pizarra, la necesidad de más tiempo, la frustración que sienten al equivocarse una y otra vez, el agotamiento que tienen debido al sobre esfuerzo que deben realizar…
Para más información, os invitamos a conocer su blog ¿QUÉ HACEMOS CONTIGO?
Gracias a todos por vuestra implicación !!! #SiQuieresSerBuenDocenteEmpatizaConLaGente