No se si este año, por las circunstancias tan peculiares y atípicas que vivimos, será mejor o peor para las personas con dislexia, pero lo que sí sabemos es que todos ellos durante toda su etapa escolar, ya viven año tras año, una situación difícil.
Con motivo de la celebración del Día Europeo de la Dislexia, el próximo jueves 8 de octubre, nos dirigimos a ustedes, para solicitar la colaboración de los ayuntamientos en todas las Comunidades Autónomas, instándoles a iluminar de rojo las fachadas de sus edificios.
El objetivo del Día Europeo de la Dislexia es sensibilizar a toda la sociedad de la Dificultad Específica de Aprendizaje (DEA) más común del mundo. La dislexia afecta a aprox. el 10% de la población mundial y, la mayoría de las personas ni siquiera son conscientes de la razón de sus dificultades en las habilidades instrumentales.
El color rojo fue elegido, para iluminar edificios y monumentos importantes desde hace algunos años para una campaña, que tuvo sus inicios en Australia y, que fue cogiendo fuerza en otros países como Canadá, Estados Unidos, Singapur, Gran Bretaña y muchos otros (véase enlace).
Precisamente se decidió, que la iluminación fuese del temido color rojo, con el propósito de reclamar el mismo, para este colectivo, y convertirlo en algo positivo, en un color que empodere a todas las personas con dislexia. El año pasado esta campaña tuvo una acogida excelente en nuestro país; se iluminaron edificios emblemáticos en todas las Comunidades Autónomas, desde ayuntamientos en las islas canarias hasta la fuente de Cibeles en Madrid, la fuente de Plaza de España de Sevilla, las Cortes de Aragón…
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